Lo que comenzó como una idea loca en medio de una conversación entre Anita y yo, en la que posteriormente incluimos a la mente maquiavélica de Pancho, para que nos ayudara en el aporte de ideas, no tardo mucho en convertirse en realidad. Cláusulas, estatutos y demás estuvieron listas para la presentación formal de la idea al resto de los chicos del grupo (Carolina, Javier, Yudexys, Glenda, Manny y su Moza). Quienes sin pensarlo mucho se embarcaron su sumaron a la idea.
Y comenzaron dieciséis (16) semanas del régimen alimenticio y ejercicios que permitiera bajar algo de peso a la semana, en eso consistía la competencia. Comenzó entonces PERDER PESO ENTRE AMIGOS (Primera temporada). Cada semana fuimos turnando de casa para realizar el chequeo correspondiente al peso y cada anfitrión se fue encargando de la pequeña recepción al grupo. Manny y su moza abandonaron el barco. Las recepciones se pasaron de informalidades a formalidades extremas, y poco a poco fue creciendo el interés de los participantes por la competencia, y generándose sin querer la rutina de vernos cada semana. El concurso/competencia nos presento entonces su real intención, la integración del grupo y la consolidación de los lazos de amistad entre nosotros, y por qué no hasta de nuestras familias, que en cada reunión nos demostraron su interés y apoyo por lo que estábamos haciendo. Pasa el tiempo y llega el final, un final que se ve perturbado por un grave incidente en mi familia, una intervención quirúrgica de emergencia de mi señor padre a nivel cerebral que en su momento me llevo a la locura y al estrés total. Yo ya había sido oficialmente declarado ganador de la competencia, con un montón de kilos de ventaja con el competidor más cercano. Me correspondía un porcentaje del premio como ganador, sin embargo los muchachos decidieron que el total del monto recaudado se me fuese entregado para ayudar con los gastos médicos de mi padre. Y más allá de esto, ellos mismos hicieron su aporte a mi familia para el mismo fin. Un gesto que en verdad jamás olvidare. Y asi termino esa primera temporada.
Luego de un mes de vacaciones, se convoco al inicio de la PERDER PESO ENTRE AMIGOS (Segunda temporada). En esta nueva temporada ingresan a la competencia dos nuevas víctimas (risas), la señora Melibell y su señor esposo Don Richard. Esta vez, se programan chequeos quincenales, y en pareja se encargarían por turnos de la recepción formal en los días previamente sorteados. Y continuamos en el plan, unos demostrando quizás más interés en la competencia que otros. Pero siempre con la disponibilidad casi religiosa de reunirnos quincenalmente. De esta segunda temporada surge la posibilidad cierta y lograda de irnos de paseo a un lugar mágico que está un poquito más cerca del cielo llamado “Gran Sabana”; que bien lo pasamos por allá; esta aventura la describo en mi pots "Mi semana mayor". Se convirtió en un compromiso gigantesco recibir a los chicos en casa quincenalmente (creo que recojo el sentir de todos los participantes aquí), pues las expectativas de la recepción fueron creciendo con cada reunión. Una mejor que la otra. Mis cuentos al respecto están en mis Pots anteriores “Crónicas de una cena 1" y "Crónica de una cena 2”.
Al momento de escribir esto estamos a una semana de la última recepción. Allí veremos quién es declarado ganador oficial de la temporada, además de quienes se llevan el titulo como mejores anfitriones. Va a estar bueno este fin de temporada sin duda.
Lo más importante de todo, es que como ya lo dije anteriormente, está loca idea, nos ha servido para consolidar los viejos lazos de amistad entre los participantes, y crear nuevos vínculos con otras que quizás no conocíamos tanto.
Desde ya se habla de una tercera temporada, quizás con nuevas reglas, quizás un poco diferente, pero donde el fin último es el encuentro del grupo para joder y disfrutar de los momentos agradables en que se ha convertido todo esto.
Hopr_81
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